Por todos es sabido, incluso más allá de las fronteras de esta productiva y progresista región Évora, que el gobierno actual en Angostura, que encabeza Aglaee Montoya Martínez, inició fuerte y pujante con las más altas expectativas de darle al pueblo un gobierno diferente a lo anteriormente experimentado.
Perfilado también como un gobierno de despegue con altura de miras y en oportunidad real de renovarle diametralmente hasta su cultura política al emblemático pueblo. Conforme transcurre el tiempo, «todo parece derrumbarse».
Aglaee Montoya, por ser joven y poseer en su persona la sensibilidad y tacto que caracterizan en lo más elemental al género femenino, circunstancia inédita en la gobernanza para esta comunidad, sin duda, estaba llamada no solo a hacer historia como la primera mandataria de este emblemático pueblo costero, sino a trascender más allá de su administración: 2018-2021.
Asimismo, a Montoya Martínez se le acredita una preparación académica envidiable en relación a sus antecesores, con grado de maestría, y en relación a los idiomas, hasta bilingüe. Llanamente: «casi un estuche de monerías».
A poco más de dos años de su gobierno, la gente opina en el municipio de manera severamente crítica, lo dicen fuerte y gritado, que su alcaldesa en aras de una eventual reelección ha perdido el rumbo en toda dirección.
Diversos sectores productivos, los miembros de su partido y ciudadanos en general, golpean a la primera autoridad sin piedad, llevando las críticas hasta donde topen, o lo que sería su equivalente: para que todo mundo se entere.
“Angostura te quiero bien”, eslogan de esta administración, ha sufrido rispidos señalamientos por el reparto inequitativo de la aplicación del impuesto predial rústico. Los conflictos del ejido en la comunidad de la “Ilama” se avivan cada vez más de manera amenazante para terminar en tragedia.
En el Sistema DIF municipal, señalan movimientos y maniobras para relalizar estudios preventivos en relación a la osteoporosis (cuidado de los huesos) a través de resonancia magnética cuántica, es decir, sin un enfoque verdaderamente profesional.
Así también, una primera etapa inteligente de ataque y contención a la emergencia sanitaria del covid-19, y que, aunque por ahora esté controlado, terminó en la nada. Por otro lado, trabajadores de la comuna aducen descuentos directos aplicados de la nómina para actividades diversas ejecutados sin notificación alguna.
Proliferan quejas de pescadores por trabajos a medias o inconclusos en el dragado en “La Reforma” que recientemente fue elevado de rango como el puerto más joven de México, y la demanda perenne de relleno de baches que afectan la parte comercial en plena cabecera del municipio.
Son tantos los escándalos para enumerar, que escapan a la mente. No obstante, en su estructura interna de gobierno, trasciende que puros‘ incondicionales’ (ajenos y traidores) tiene a su lado, película que repite su trama en el Comité Municipal del PRI.
En definitiva, si se reelige o no Aglaee Montoya, pasará a la historia como la primer mujer en hacer: «una agria historia en Angostura».
Esta historia, apenas inicia…
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