Calificado por el gobierno mexicano como “el gran golpe de la década”, Juan Gerardo Treviño Chávez, alias “El Huevo” fue deportado a Estados Unidos en la noche del lunes, según confirmaron fuentes oficiales a BBC Mundo.
El ciudadano estadounidense y presunto líder del cartel del Noreste fue detenido por el ejército mexicano en el nororiental estado de Tamaulipas.
Era requerido por las autoridades de EE.UU. bajo los cargos de conspiración para el tráfico de drogas y lavado de dinero, por lo que había una orden de aprehensión con fines de deportación en su contra.
Según la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de México, Treviño fue detenido cuando personal militar realizaba un operativo en terreno en la madrugada del lunes en la colonia Hidalgo de la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo.
Durante la operación militar, testigos les dijeron a medios locales que se registraron fuertes enfrentamientos a balazos entre militares y miembros de la organización criminal que llevaron al cierre de puentes internacionales con Estados Unidos durante varias horas durante la detención del sospechoso.
“Se reportaron disparos en contra de instalaciones militares y de las oficinas del Consulado de Estados Unidos en Nuevo Laredo, además de enfrentamientos y persecuciones en varios puntos de la ciudad”, señaló el parte oficial de la Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas.
Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores de México, informó que durante un encuentro entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y el Secretario de Seguridad de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, uno de los temas más importantes fue la detención del presunto líder del cartel del Noreste, uno de los remanentes del grupo delictivo Los Zetas.
Ebrard señaló que la captura de Treviño es “una de las detenciones más importantes de la última década” y agregó que la detención fue posible gracias al plan de seguridad “Entendimiento Bicentenario” entre México y Estados Unidos, aunque no entregó más detalles.
Según las autoridades mexicanas, el deportado tenía otras dos órdenes de aprehensión: una en el estado de Tamaulipas por extorsión y asociación delictiva y otra en el estado de Coahuila por homicidio doloso y terrorismo.
¿Quién es “El Huevo”?
De acuerdo a la información difundida por el gobierno, “El Huevo” era el líder máximo del cartel del Noreste y de su brazo armado de sicarios Tropa del Infierno, una organización criminal que ha mantenido una lucha encarnizada con células del cartel del Golfo.
Juan Gerardo Treviño formaba parte de una familia que mantuvo el control de los Zetas hasta la disolución del grupo.
“El Huevo” es sobrino de Miguel Ángel Treviño Morales, conocido como el “Z40”, dirigente de los Zetas antes de la desintegración del cartel, y de Óscar Omar Treviño Morales, alias el “Z42”, además de ser hermano de Juan Francisco Kiko Treviño Chávez, otro miembro de la familia vinculado al tráfico de drogas.
Tras la captura del Z40 y su posterior condena a cadena perpetua, los Zetas se fracturaron en varias células delictivas, perdiendo el poder que solían tener en un amplio territorio del país.
Esta organización se remonta a la década de los 90, cuando el cartel del Golfo estaba en su apogeo y sus líderes comenzaron a reclutar exmilitares y antiguos policías federales para contratarlos como sus guardaespaldas.
El grupo de guardaespaldas recibió el apodo de Los Zetas y, con el paso del tiempo, formaron su propia organización.
Los Zetas se hicieron conocidos por sus métodos violentos y años más tarde comenzaron a desintegrarse en distintos grupos. La familia Treviño Morales es considerada uno de los grupos herederos de la organización criminal.
La captura del Huevo, dicen analistas, podría significar el final de los grupos remanentes de los Zetas, aunque no se puede descartar una reorganización de sus miembros bajo una nueva estructura de poder.
