Ciudad de México, (SinEmbargo).- El Servicio de Administración Tributaria (SAT) confirmó que en septiembre presentará una reforma fiscal con la que pretende recaudar 200 mil millones de pesos adicionales para 2022 “como un primer saque” sin el aumento de impuestos.
La titular del SAT, Raquel Buenrostro, explicó que el dinero adicional a la Ley de Ingresos de la Federación de este año por la reforma fiscal, equivale a uno por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y que tiene como objetivo llegar al dos por ciento.
“Históricamente se entiende que alguien hace una reforma fiscal cuando hay un incremento de tasas, lo que nosotros decimos es que sí va a haber modificaciones fiscales, pero esas modificaciones fiscales no consideran cambio de tasas; es decir, aumento de impuestos”, explicó Buenrostro.
Las autoridades hacendarias someterán las modificaciones a consideración del Congreso de la Unión como “miscelánea fiscal” con el Paquete Económico de 2022 para que se incorporen en la Ley de Ingresos del próximo año.
“Estas modificaciones fiscales son facilidades administrativas y digitales para hacerle la vida más fácil al contribuyente, en primer lugar, la otra son precisiones de ley para evitar planeaciones fiscales agresivas y defraudaciones fiscales”, señaló.
Destacó que estas acciones no sólo son estrategias hacia los grandes contribuyentes, sino para que todos cumplan con sus obligaciones fiscales, lo que permitirá cumplir con los objetivos planteados.“Nosotros esperamos este año cumplir con lo que prometimos, que es cumplir con la Ley de Ingresos, ahorita vamos, digamos tablas, queremos mantenernos así y nosotros esperamos que el próximo año nos dé, con relación a esta Ley de Ingresos, al menos unos 200 mil millones más, esas son las primeras estimaciones”, dijo.Buenrostro subrayó que con la reforma se está buscando justicia fiscal y que todo mundo pague lo que tenga que pagar, “ni más ni menos, lo que es justo, conforme a su nivel de ingresos”.
El SAT también dio a conocer que las tasas efectivas del ISR serán aplicables a grandes contribuyentes en 40 ramas de la actividad económica y tienen potencial para recaudar 700 mil millones de pesos provenientes de evasión y elusión fiscal, equivalente al tres por ciento del PIB.
