Uno de los principales objetivos de un agricultor es obtener altas cantidades de producción, sin embargo, en su búsqueda por cumplir esta meta realizan una aplicación excesiva de agroquímicos para el control de fitopatógenos, causando una serie de problemas ambientales a nivel ecológico, pero también una disminución de la sostenibilidad de la actividad agrícola, indicó la doctora Nancy Ley López.
La investigadora de la Facultad de Agronomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), a la par de los doctores Moisés Gilberto Yáñez Juárez, Miguel Armando López Beltrán y Raymundo Medina López, expuso la importancia de bacterias benéficas en la sanidad vegetal como una alternativa amigable con el medio ambiente que contrarresta el uso de químicos contaminantes para combatir los agentes fitopatógenos que ocasionan pérdidas en el rendimiento de los cultivos.
“Estas tienen diferentes tipos de modos de actuar, los principales es la producción de antibiosis; es la bacteria, produce diferentes metabolitos secundarios, los cuales combaten a estos microorganismos fitoparásitos, pero también actúan de manera de competencia por el espacio y nutrientes, al igual que crea a la planta, o a los cultivos en este caso, una resistencia sistémica inducida la cual ayuda a que la planta se fortalezca y combata directamente a estos microorganismos fitopatógenos”, informó.
De igual manera, expresó que desde la Nueva Universidad se promueve e impulsa el desarrollo de nuevos conocimientos, mismos que pueden llevarse directo a los sectores agrícolas para mejorar el rendimiento de los cultivos, y a su vez, alcanzar las metas propuestas en la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
“Es importante para generar nuevo conocimiento, sobre todo para los egresados de las Facultades tengan este conocimiento y lo lleven a práctica con el sector agrícola, y ellos tengan conocimiento y concientización de lo que sucede con las malas aplicaciones de estos agroquímicos y que conozcan que existen estas alternativas de control”, mencionó.
