Guamúchil, Sinaloa.- De escasos 19 años ya estaba en las aulas frente a niños buscando aportar sus conocimientos adquiridos y lograr una formación en ellos que los hiciera mejores personas, tanto en lo educativo como en sus relaciones interpersonales, su misión era diferente educar a niños especiales y que a la fecha después de 34 años lo sigue haciendo con la misma pasión como la de aquel primer día del año de 1985 en su primer centro de trabajo en la escuela primaria Salvador Alvarado de la comunidad de Tultita.
La maestra Emma Gloria Audelo Esquerra, reconocida y querida por muchos alumnos y quienes han tenido la oportunidad de estar cerca de ella, comenta que por lo general nadie está preparado para enfrentar los retos que la propia vida se encarga de poner frente a cada ser humano, lo mismo le pasó a ella al elegir esta profesión de maestra, y mucho menos cuando definió trabajar con niños especiales, situación que brinda un valor extra al educar.
El trabajar con niños especiales comenta la maestra Emma le ha dejado un gran aprendizaje en su persona y como profesionista, ya que en muchas ocasiones niños que se les dificulta leer y escribir y que en ocaciones nunca lo logran, desarrollan habilidades que los hacen crecer como persona y es ahí donde los objetivos se van cumpliendo.
“Dios es tan sabio y poderoso que mi idea cuando inicie en esto no era tanto querer la carrera pero al estar ahí y estas aprendiendo tanto de esas personitas que a veces que enseñan más que lo que aprendemos en el estudio, cuando los conoces, cuando sabes y ves sus necesidades y observas sus logros es algo muy satisfactorio”, dijo.
A pesar de sus 34 años de trabajo, su semblante al hablar de la educación de los niños especiales se llena de gozo y sus ojos se humedecen por el sentimiento que la arropa, esto debido a que ha sido testigo durante su carrera como docente de como se ha logrado incluir a estos niños en los programas educativos normales, cuando anteriormente muchos de ellos eran relegados en una escuela especial, sin derecho a desarrollar sus múltiples habilidades, situación diferente hoy con el programa de inclusión educativa que les permite hasta llegar a cursar la preparatoria.
Actualmente Directora de la Unidad de Servicio de Apoyo a la Educación Regular (USAER) 191 de Educación Especial de la zona 026 y coordinadora de un equipo interdisciplinario que le permite trabajar con niños de secundarias, así como con sus padres y maestros, quienes trabajan en la búsqueda del aprendizaje de niños ciegos, autistas, niños con problemas severos de comunicación, de conducta y de aprendizaje.
La maestra Audelo Esquerra menciona que a pesar de que a los 28 años hubiera podido retirarse como docente, la pasión que siente por su profesión no le j pensar alejarse de las aulas, acentuando que mientras se sienta útil seguirá trabajando por que los niños especiales puedan alcanzar mejores niveles educativos, así como también sean respetados por sus compañeros al integrar grupos normales en las escuelas.
Emma Gloria dice que a través de los años su formación educativa dentro del magisterio nunca ha sido en relación al incremento de sus ingresos, sino en la satisfacción personal de seguir amando lo que hace, incluso una vez retirada.
“Muchos maestros estudian y estudian pero no aplican lo que estudian en los niños, simplemente lo hacen para ganar más y que al final de cuentas terminan sus carreras sin la satisfacción de haber sido felices con lo que hacían”.
De sus mayores satisfacciones dice, siempre será el recibir sonrisas y abrazos de sus niños, como les llama ella, sin embargo también se le han presentado retos que le han dejado una gran sabiduría.
La situación que se vive hoy en día con el tema de la pandemia del Covid-19, los ha obligado a todos en el tema educativo a hacer uso de las tecnologías, tecnologías que les permitirán que este día del maestro no pase desapercibido al permanecer todos confinados en casa, a través de las cuales les permitirá recibir felicitaciones de sus alumnos, amigos y madres de familia.
“Cada quien va a recibir lo que merece en función de lo que ha hecho, yo no me voy a quejar por algo de lo que no he trabajado, ni ponerme a exigirles algo que no me haya ganado, yo siento que si un mensajito me llega ya voy a estar bendecida con eso”, manifestó la maestra Emma Gloria Audelo Esquerra.
En este Día del Maestro además de felicitar a sus compañeros maestros y maestras, manifestó que lo mejor que les pudo pasar es contar con esta profesión la cual deben amar, ya que no quien sea puede contar con la bendición de poder educar y sobre todo educar con el ejemplo, así como contar con la sensibiidad, pedagogía y la didáctica que se necesita para llegar al corazón de los niños primero y después llegar a su cerebro.
